¿Cómo va la cosa?

Estimad@ ciudadan@:

En primer lugar, te cuento que hoy jugué tenis, con mi profe de hace quince años atrás. (Ver foto) Yeahhh. Sudé cual sapo en un desierto, jugué como el quetejedi, pero quedé feliz como lombriz. Y como salí con energía de la reconfortante ducha, me lancé a hacer la pega que había venido postergando de puro flojo, en beneficio de mis lectores: tragarme las 80 páginas de normas constitucionales ya aprobadas en el Pleno y hacer para mis lectores una síntesis que les permita formar una opinión cabal para la votación del 4 de septiembre. Ojo que todavía queda una semana más del Pleno antes de mandar sus cositas a la Comisión de Armonización, así es que este informe es obligadamente parcial. Pero lo que ya está… está.

Por cierto, constaté que mucha pero mucha chimuchina alarmante producida por febriles Comisiones ya había muerto, al requerirse 2/3 del Pleno.  Eso es muy bueno.

Dicho lo anterior, hay 5 temas que a mi juicio son muy amenazantes. Usted decide como votará en septiembre, mientras saca del armario las guitarras, las espuelas, el poncho y se compra una damajuana de chicha, ojalá pasteurizada, para pasar un feliz 18.

1. El sistema político, “la madre de toda norma constitucional”, con serios defectos. En primer lugar, se termina el Senado, órgano que históricamente había servido como gran contrapeso a las fuertes pulsiones populistas de la Cámara, y su sustitución por una aguachenta Cámara de Regiones. Para peor, se terminan los quorum calificados, salvo exigir que la Cámara deba sesionar con al menos 1/3 de Diputados. Ejemplo: un día de frío asiste sólo un 34% de los Diputados, pero la bancada indígena (12%) se pone de acuerdo para asistencia plena. Basta con que consigan 5% de diputados amigos, con los que por ejemplo transaron los votos para un quinto retiro de las AFP, para que se legisle (como veremos más adelante) que los territorios indígenas restituidos ocupen del mar a la cordillera en el Wallmapu, y del mar hasta la frontera con Bolivia en el norte.
2. Un “candado constitucional”. Como nuestros constituyentes están obviamente enamorados del fruto de su cacumen, la ponen bien difícil para cambiarla. Se necesitaría la firma del 10% de los electores para comenzar la modificación… o sea, habría que recabar a lo menos un 1.5 millones de firmas. Chúpese esa.
3. Riesgo de gigantismo en los territorios indígenas. Los pueblos originarios quedaron hoy, 5 de mayo, con derecho a la restitución de los territorios que ellos habitaron: “…reconoce el derecho de los pueblos y naciones indígenas “a sus tierras, territorios y recursos”. Su tamaño y ubicación quedará sujeto a la legislación de… la Cámara de Diputad@s arriba mencionada. En una de esas, habrá que expropiar la Torre Entel y otros grandes edificios, con un “pago justo” por ellos. Tome nota de que, el día de la inauguración de la Convención, la «bancada indígena» lanzo una fuerte rechifla al entonarse la canción nacional. Esas son sus reales «pulsiones reivindicativas». Gesto muy menor pero muy mayor.
4. Sistema de Justicia politizado. Toda su gestión quedará en manos de un Consejo de Justicia en que los jueces serán minoría. Todo… nombramientos de jueces en particular.
5. Aumento del riesgo económico y aun mayor paralización de inversiones. Ya está aprobada la no-apropiabilidad del agua, lo que pone en riesgo a toda la agricultura de riego, pues sus derechos de agua estarán a discreción de un funcionario. (¿Plantaría usted paltos o naranjos?) Asimismo, ya está establecido el fin de las concesiones carcelarias, y está por verse esta semana la suerte que correrá el resto de las concesiones y las empresas mineras. El tema de la propiedad industrial se juega en los próximos días en el Pleno, los convencionales creen que ese es un tema «imperialista», asi que cruce los dedos porque su desaparición daría simplemente para bajar la cortina.

Sería todo por hoy. Sin duda más de algún lector comentará otra norma que se me pasó, o que yo no prioricé para mencionar, por brevedad.

¿Sería grave un Rechazo? No pasaría gran cosa. El 5 de septiembre el actual y muy vigente Congreso, el poder constituyente de última instancia en cualquier país, harto más representativo que el Pleno convencional, emitiría un comunicado informando que retomará la confección de la Carta Magna, tomando retazos de esta (que SI tiene muchos pedazos buenos y aprovechables, algo así como 60 de las 80 páginas que me tragué hoy) y convocando a un grupo de expertos para su perfeccionamiento. A mi modo de ver, con un par de meses quedaría lista para plebiscitar la Constitución 2.0

Usted dirá como vota el 4 de septiembre. En una de esas, en esta semanita que queda, el Pleno corrige todos los flecos que mencioné más arriba, en cuyo caso me comprometo a avisarles, correr en paños menores desde La Moneda a Plaza Italia, y zamparme 5 cervezas con 5 lomitos en la vapuleada Fuente Alemana. Hasta la vista.